Windsorinos de Kínder asistieron a actividad que promueve su proceso de articulación hacia la educación básica.

Las obras de teatro en los niveles más pequeños de la educación escolar son una buena herramienta educativa que contribuye al desarrollo lingüístico, creativo, emocional y social de las y los niños.

En ese contexto, las alumnas de la carrera de Educación Parvularia, Michelle Jiménez e Ivonne Salgado, quienes realizan su práctica progresiva II en el Windsor School, presentaron una obra de teatro para las y los windsorinos de kínder y 1° año básico como parte de su programa curricular.

ACTIVIDAD

Con entretenidas actuaciones y una historia que dejó sorprendidos a todos los presentes, las estudiantes en práctica de Educación Parvularia presentaron la obra “La Tortilla Corredora”.

La instancia, la cual se transformó en una experiencia divertida y enriquecedora para las y los pequeños windsorinos, tuvo como finalidad favorecer la articulación educativa del nivel de Kínder, a primer año básico.

En ese contexto, el proceso de articulación entre kínder y primero básico implica una comunicación efectiva entre docentes, una continuidad curricular, una adaptación gradual, como también un apoyo emocional y social, entre otras aristas.

Para las estudiantes en práctica, este tipo de actividades llaman la atención de los más pequeños ya que les ayuda, a través de la escucha, conocer la narración de historias y la representación de personajes. Lo anterior, ya que favorecen en incrementar su atención e imaginación.

Así, las alumnas en práctica también hicieron hincapié en que este tipo de herramientas educativas son una buena forma de preparar a los estudiantes en su proceso de articulación hacia la educación básica. Lo anterior, ya que les ayuda en su proceso académico, como también en aspectos socioemocionales.

Cabe destacar que la obra contó con la participación de las misses de Kínder, María Fernanda Eguíluz y Fabiola Muñoz; Mr. Andrés Agüero y Miss. Nhalashtka Dinamarca.